DJI entra en la Entity List de EE.UU.

La Entity List es una especie de «Lista Negra» de EE.UU. que va a cambiar la forma que tiene DJI de ofrecer sus productos en todo el mundo.

Cuando pensé en escribir esta entrada tenía la intención de no meterme en política. Al fin y al cabo esto es un blog de drones, y la visión política de un piloto de drones no tiene por qué ser relevante para nadie. No obstante, después de deliberar un buen rato creo que es literalmente imposible ser justos con la manera de tratar la información que hoy nos atañe sin entrar de lleno en esas cosas que como pilotos de drones no deberían tener que preocuparnos: sí, política. Así que voy a plasmar los hechos, así como mis opiniones al respecto, tratando que quede clara la diferencia entre ellos y animando a los que tengan una visión diferente del tema a que la compartan en la sección de comentarios hechos siempre desde el respeto, con el objetivo de compartir opiniones, fomentar el debate y aprender los unos de los otros más que faltarnos al respeto. Dicho esto, vamos al turrón.

Los precedentes de la entrada de DJI en la Entity List

En los últimos años EE.UU. había amenazado de distintas maneras a DJI. Entendamos el contexto:

El mercado de drones lleva años en expansión, y dadas las evoluciones que vemos en esta tecnología, está claro que aún está muy lejos de alcanzar su techo. Y aunque no está claro hacia dónde se va a dar esta expansión porque hay muchos posibles horizontes, en función de la infinidad de utilidades que se le puede dar a tener herramientas no tripuladas en el aire, lo que sí está claro es que quedan años por delante de un sector en expansión. Esto supone mucho, muchísimo dinero que queda por repartirse, en un contexto en el que DJI domina el mercado. Sólo en EE.UU., DJI tiene el 77% del mercado, con empresas nacionales como Skydio luchando por hacerse un hueco.

Finalmente, EE.UU. ha optado por incluir a DJI en su “Entity List”, o “Lista de Entidades”.

Esta Entity List es una lista desarrollada por los EE.UU de empresas, instituciones, organizaciones, gobiernos… Que son partícipes de actividades contrarias a los intereses de seguridad nacional y/o política exterior de EE. UU.

En este caso, se ha acusado a China de utilizar drones de DJI para la vigilancia de minorías raciales en la provincia de Xinjiang, en un acto de abuso a gran escala de derechos humanos.

Qué supone esta medida

En primer lugar, va a dificultar la distribución de productos de DJI en EE.UU., así como la colaboración de empresas estadounidenses con DJI. Esto podría significar que DJI tenga que encontrar nuevos proveedores de hardware o software, como ya le ocurrió a Huawei en mayo de 2019. En cualquier caso, es seguro que si esta medida se mantiene en el tiempo (no se espera que el presidente electo Joe Biden, que entra en el cargo el 20 de enero; eche para atrás esta decisión), perjudicará a DJI como negocio, así como a sus productos, y por tanto a los consumidores (dentro y fuera de EE.UU.).

Por qué está moralmente mal esta decisión

Aquí es donde meto mi opinión, personal y subjetiva, y abro paraguas a lo que pueda llegar.

Que un país tome medidas económicas proteccionistas es lógico, normal y entendible. Al fin y al cabo, son responsables de su propia economía y si consideran que tienen una infraestructura empresarial capaz de competir en cierto modo con DJI ahorrándose millones de dólares de dólares que terminarían exportados a una economía rival, es lógico que quieran poner puertas al fabricante chino. El mundo en este sentido no es más que un gran intercambio internacional de divisas, y todos los países luchan con los medios que tienen porque el balance sea positivo y no negativo.

Que esto lo haga el país adalid del capitalismo, la no intervención económica y el libre mercado, sí es reprobable. Por supuesto (y esto es mi opinión y la de muchos más) no es la única contradicción flagrante entre la imagen que quiere proyectar EE.UU. (dentro y fuera de sus fronteras) y las políticas que realmente lleva a cabo.

Pero que esto lo haga alegando que la empresa que lleva años comiéndoles la tostada en el desarrollo y venta de UAVs es responsable de vulnerar derechos humanos es flagrante. Y no porque no sea cierto, sino porque la moral selectiva por la que castigamos a empresas escogidas a dedo en un mundo que se ha erigido a base de guerras, discriminación, violencia, esclavitud y en general, vulneración de los derechos humanos de millones de personas (EE.UU. no siendo precisamente una excepción a la regla) es para llevarse las manos a la cabeza.

Qué nos queda por delante

A pesar de los problemas que se avecinan para DJI, no esperaría grandes cambios en el panorama de los drones a corto plazo. Si bien es cierto que tal vez esta no sea la mejor semana para comprar acciones de la marca china, la nota positiva es que hay muchas marcas además de la propia DJI volcadas en perfeccionar la tecnología de la que ahora disponemos. El futuro de los drones sigue siendo brillante

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